Todo sobre Düsseldorf: lugares imprescindibles y algunas curiosidades

Düsseldorf es uno de esos lugares que no te esperas. Al menos para mi, no estaba en la lista de ciudades europeas que hubiera priorizado visitar. Pero me encantó. Fui con una amiga, y elegí el destino de casualidad, por el único motivo de que era el lugar de Europa (de los que no habíamos visitado aún) al que más barato era volar en las fechas que teníamos disponibles. Y mereció muchísimo la pena. A día de hoy, volvería por muchos motivos más allá del precio. Sigue leyendo y te cuento todos los lugares chulos que descubrí en Düsseldorf durante mi visita de 4 días a la ciudad y alrededores.

La ciudad es grande, así que si prefieres una visita guiada por la ciudad para no perderte nada, aquí puedes reservar una a buen precio.

1. El casco antigüo de Düsseldorf

1.1. Avenida Königsallee y el parque Hofgarten

La Avenida Königsallee (o Avenida del Rey al traducirlo), es una de las principales zonas de la ciudad donde ir a dar un paseo. Tiene árboles a uno y otro lado y una fuente rectangular en el centro que puedes cruzar a través de cualquiera de sus 3 puentes, adornados con estatuas.

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Es también la zona donde encontrarás algunos de los mejores hoteles (en los que yo no me alojé, por cierto) y de las tiendas más lujosas (en las que yo tampoco compré). Independientemente de si puedes o no permitirte hacer gasto, merece mucho la pena ir, aunque sea a dar un paseo.

La avenida desemboca en el parque Hofgarten, un parque público bastante apañado y con mucho ambiente para continuar el paseo: tiene lago, cisnes, patos, ardillas, esculturas y al final, un edificio señorial con la fachada de color salmón (el palacio Jägerhof) en cuyo interior se encuentra el Museo Goethe (uno de los escritores alemanes más reconocidos).

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1.2. Marktplatz (la plaza del mercado) y el ayuntamiento

En pleno casco histórico, se encuentra esta plaza, donde se celebran eventos y festividades como el famoso Carnaval de Düsseldorf, y donde se coloca el mercadillo navideño en época de adviento.

En la plaza encontrarás el edificio del ayuntamiento de Düsseldorf (el Rathaus) de estilo gótico.

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1.3. Un paseo a las orillas del río Rin (Rheinuferpromenade)

A apenas unos pasos desde la Marktplazt, se encuentra el río Rin (Rhein) que atraviesa la ciudad de Düsseldorf. Merece muchísimo la pena bordearlo a pie o en bici, para disfrutar de estampas como estas:

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Al fondo de la foto se aprecia la iglesia católica de St Lambertus, que destaca por que su torre está ligeramente inclinada. Sí, como la torre de Pisa, pero con menos inclinación. Si te adentras de nuevo hacia la derecha, verás el Alter hafen o puerto antigüo, donde aún descansa un barquito de pescadores en recuerdo de lo que fue, y que bien merece una foto.

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Otro buen plan que quizá te apetezca, es hacer un paseo en barco por el Rin como este para admirar su belleza desde el agua.

2. Medienhafen (el puerto) con sus edificios modernos

2.1. Los edificios de Gehry

Y si sigues bordeando el río hacia el sur, a una media hora a pie, llegarás al puerto de Düsseldorf, el Medienhafen, la zona de negocios de la ciudad que destaca turísticamente por sus originales edificios obra del arquitecto Frank Gehry, que dejó allí su arte para disfrute de sus ciudadanos y visitantes.

Se trata de 3 edificios pegados unos a los otros, con formas asimétricas que descansan junto al río y se reflejan sobre este. Sin duda, uno de los imprescindibles de Düsseldorf.

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Además de Gehry, otros arquitectos famosos dejaron huella en la zona con edificios tan curiosos como el Roggendorf-Haus, por el que escalan divertidos muñecos de colores.

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2.2. El Rheinturm (o Torre del Rin)

En el mismo puerto, encontrarás la Torre de comunicaciones o Torre del Rin que preside la zona.

Me recordó bastante al restaurante OVNI de Bratislava, por su forma y por tener un restaurante en lo alto de la torre, y un mirador al que puedes acceder pagando 9€ para tener una vista única de la ciudad. Ambos además, se encuentran al lado de un rio.

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3. Curiosidades de Düsseldorf

3.1. Niño haciendo la voltereta: el símbolo de Düsseldorf

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Y seguro que mientras paseas, te llama la atención ver estatuas, esculturas, alcantarillas y elementos varios con la imagen de uno o varios niños haciendo la voltereta. Sí, es el símbolo de la ciudad de Düsseldorf, y por eso, los encontrarás en varios puntos durante tu visita. Se les conoce como Düsseldorfer Radschläger.

Al parecer allá por el año 1900, hubo una batalla (la batalla de Worringen) cuyo victoria festejaron los niños haciendo volteretas y piruetas por toda la ciudad.

Una de las "volteretas" más conocida se encuentra en la Burgplatz.

También, si te gusta llevarte un recuerdo de la ciudad, encontrarás la voltereta de Düsseldorf en llaveros, imanes, postales y souvenirs varios.

Yo de recuerdo, me llevé esta foto, sacando a la niña que llevo dentro:

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3.2. Stylites

Otra cosa que nos resultó curiosa de Düsseldorf fueron sus "Stylites" (Säulenhailigen en alemán), del escultor Christoph Pöggeler. No son otra cosa que estatuas realistas de personas cotidianas haciendo labores cotidianas y que se encuentran repartidas por toda la ciudad en lo alto de peanas destinadas a publicidad. Hay un total de 10 (aunque siguen creciendo) y es divertido jugar a encontrarlas mientras paseas. Un ejemplo serían estas:

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3.3. Altbier, la cerveza de Düsseldorf

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Y por supuesto, no te vayas sin probar su cerveza, producida en la ciudad: la Altbier (cerveza vieja) o Alt.

Düsseldorf está lleno de bares y pubs y en cualquiera de ellos podrás encontrarla.

"Ein Altbier bitte", es todo lo que necesitas saber de alemán para que te sirvan una bien fría. Puedes acompañar la frase con un gesto con tu mano indicando el tamaño en que la quieres. Y listo, ¡a disfrutar!

Si lo prefieres, existen tours (el Altbier Safari) que te llevan a degustarla y a visitar las fábricas de cerveza y cervecerías más famosas de la ciudad. No lo hicimos, pero por supuesto sí nos tomamos varias por nuestra cuenta. Chin chin.

3.4. Düsseldorf y las bicicletas

Como tantas otras ciudades europeas, Düsseldorf es una ciudad que es fácil transitar en bici. Encontrarás muchas facilidades para alquilar una y verás muchos düsseldorfienses moverse sobre ellas.

Sin duda, una muy buena opción para recorrer el margen del río y no perderte nada, y sobretodo, para acercarte a las zonas más alejadas de la ciudad como la Kiefernstrasse, el jardín japonés o el castillo de Kaiserswerth de los que hablaremos más abajo. Están bastante lejos para ir a pie, pero si el plan de alquilar una bici no va contigo, también puedes coger el tranvía o el autobús para visitarlas.

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4. Otros sitios de interés alejados del centro

Para ir a estos puntos de la forma más económica, recomendamos especialmente adquirir la Dusseldorf Card, que además de incluir la entrada a muchos de los puntos principales de la ciudad, te incluye transporte público ilimitado durante 24h o más.

4.1. Kiefernstrasse, la calle de los graffittis

Volviendo al arte, por supuesto no pudes dejar de visitar esta calle, la Kiefernstrasse, y zonas aledañas con sus fachadas viejas plagadas de graffitis como estos:

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Lo cierto es que nosotras no nos enteramos de su existencia y no lo visitamos, pero ahora buscando información y fotos, me quedo con esa sensación de que es una joya oculta que me hubiera encantado disfrutar en persona.

Al parecer se trata de un barrio obrero con una turbulenta historia de ocupación, detenciones, cultura punk y antifascismo. Un barrio multicultural donde residen personas de más de 40 países diferentes. Si vuelvo, no me lo pierdo.

4.2. Kaiserswerth y su Castillo

Bastante alejado del centro, se encuentra este antiguo barrio residencial que es lugar de interés turístico por su historia y por las ruinas de su castillo. Un barrio muy bien cuidado y con encanto repleto de terrazas y tiendecitas.

Bajo mi punto de vista prescindible, aunque si tienes tiempo o eres fan del turismo de ruinas y castillos, te gustará.

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4.3. El Jardin japonés

De los 619.000 habitantes que tiene Düsseldorf, unos 10.000 proceden de Japón.

Este jardín, se encuentra en la Casa de la Cultura Japonesa de la ciudad (el EKO-Haus der Japanichen Kultur). A una media hora a pie del centro, es un lugar pequeño y tranquilo al que acercarse si te apetece ver flores, estanques, fuentes de agua, y mini templos japoneses.

Si vas con el tiempo justo, te lo puedes ahorrar porque no tiene nada espectacular, pero si tienes días de sobra, quizá te apetezca acercarte a respirar algo de paz. Además, es gratis ;)

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4.4. El Palacio de Benrath

Y en la otra punta, hacia el sur, ya fuera de la ciudad, se encuentra este palacio barroco del siglo XVIII, rodeado de unos inmensos jardines repletos de flores y cisnes.

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Dentro, se encuentra el Museo de Historia Natural. Entrar al palacio cuesta 14€. No puedo decirte si merece o no la pena porque no entré.

Los jardines son gratuitos y sí son muy bonitos.

Pero diría que lo que más me gustó, de camino al palacio, fue encontrar esta caseta con forma de fresa donde comprar una tarrina.

No recuerdo el precio exacto, pero sí que se me antojó caro en el momento. Aún así, en cuánto di el primer bocado quedé satisfecha, por que sí, ¡sabían a fresas!. Acostumbrada a las fresas con "sabor a nada" del supermercado, me supieron a gloria.

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¿Qué te ha parecido este artículo? Si estás planeando visitar Düsseldorf y lo que te hemos contado te ha resultado útil o interesante, te agradecería muchísimo que a la vuelta nos dejes un comentario con tu experiencia en la ciudad. ¡Que la disfrutes!